La muerte súbita en el deporte es un hecho.  Son circunstancias excepcionales y de muy difícil prevención.  En la mayoría de los casos ocurridos, no existe una clara relación entre causa y efecto.

La detección de factores de riesgo, es muy importante para evitar situaciones graves.  En el ámbito del deporte profesional, esto no es problema, debido a los exhaustivos reconocimientos a que son sometidos los profesionales del deporte.

En los deportes federados, existe el preceptivo reconocimiento médico, previo para el otorgamiento de la correspondiente ficha federativa.  En nuestra larga experiencia en este campo, consideramos que deberían existir centros acreditados para los reconocimientos médicos deportivos.  Al igual que ocurre con los reconocimientos de las autoescuelas para el carnet de conducir o más modernamente para los reconocimientos médicos en el ámbito laboral. Valga como ejemplo, el médico recién licenciado, que juega en un equipo regional y él mismo rellena los certificados médicos de sus compañeros.

La detección de factores de riesgo para la práctica deportiva, como pueden ser cardiopatías ocultas, asma, diabetes, epilepsia entre los más destacados, nos permiten establecer las pautas deportivas a seguir en cada caso, así como, los sistemas de prevención que deben llevar y los controles médicos a los que deben someterse.

Cada día es más frecuente la participación de personas en deportes de muy alto riesgo, como son el puenting, y el rafting.  Debe establecerse una regulación para el control de este tipo de deportes, que poco tienen de deporte y mucho de aventura.