Apenas ha comenzado la temporada y ya comienzan a aparecer los temidos cuadros de pubalgia que tanto dolor de cabeza nos producen a los responsables médicos de los equipos. Como ya sabemos se trata de una lesión que está provocada por un desequilibrio muscular que ocurre a nivel de la encrucijada púbica, donde los músculos rectos anteriores del abdomen y los aductores no trabajan al unísono y terminan produciendo dolor. Inicialmente es un dolor sordo que no impide el seguir entrenando, pero que a medida que pasa el tiempo, si no remite con el tratamiento y el entrenamiento controlado, se va haciendo cada vez más intenso hasta llegar en ocasiones a ser incapacitante. En la mayoría de los casos, las pubalgias suelen ceder con la combinación de tratamiento medicamentoso, fisoterapia selectiva, electroterapia y reequilibrio muscular de la zona afectada.

Sin embargo, en ocasiones el tratamiento conservador no es suficiente y no queda más remedio que optar al tratamiento quirúrgico. Si bien en los últimos tiempos, la cirugía tiene menos adeptos. En el caso del jugador Sílvio, lleva poco tiempo con el proceso y hay que esperar a que su adaptación a los nuevos sistemas de entrenamiento y nuevo medio de vida se realicen de forma completa, antes de optar a tratamientos más agresivos. Las experiencias de los médicos del Atlético en este aspecto son amplias, motivo por el cual debemos de estar tranquilos los aficionados colchoneros.

Consulta el artículo en el Diario AS: http://opinion.as.com/opinion/2011/10/12/portada/1318445763_850215.html