Esta semana el Dr. González escribe para el Diario AS sobre la lesión de cruzado de Llull.

Nuevamente en el transcurso de una jugada normal, cuando el jugador intentaba zafarse del marcaje de otro jugador, apoyó con el interior del pie, la rodilla giró bruscamente hacia dentro, y la pierna se fue, claramente, hacia fuera, provocando el mecanismo típico de rotura completa de cruzado anterior.
Acto seguido el jugador se echó la mano a la rodilla evidenciando desde el primer momento que existía una lesión importante. Las pruebas médicas posteriores, confirmaron las sospechas iniciales.

Confirmado el diagnóstico Llull no tiene más remedio que armarse de paciencia ya que el proceso de recuperación será largo hasta poder volver a la cancha de juego.

Al jugador se le van a realizar más pruebas diagnósticas y, lo más probable, es que se decida optar por la intervención quirúrgica. En este caso no hay prisa por operarle de forma inmediata ya que, según opina el Dr. González, es mejor que pase la fase aguda de la lesión (un periodo de unas dos semanas) y posteriormente intervenir.

El pronóstico en cuanto a tiempo de recuperación oscila en torno a los 9 meses. Es cierto que a los 6 meses el jugador podría estar entrenando ya a cierto nivel, pero lo recomendable en este tipo de lesiones es no forzar ni acelerar la recuperación ya que las consecuencias pueden ser negativas.

No obstante, según el Dr. González, para alcanzar el nivel de rendimiento previo a la lesión es muy probable que pase al menos un año.

Consulta el artículo en el Diario AS: No volveremos a ver al mismo Llull hasta dentro de un año