A nivel del hombro, la articulación acromioclavicular está formada por la poción distal de la clavícula con el acromion (relieve óseo de la escápula).

La fijación de dicha articulación, para evitar su desplazamiento, corresponde a la cápsula articular y al ligamento acromioclavicular principalmente. Existen otros ligamentos, como el coracoclavicular y coracoacromial, que también tienen cierta importancia a la hora de fijar dicha articulación.

El esguince de esta articulación es una lesión traumática frecuente, sobre todo a nivel deportivo. Se produce por caída con el brazo en extensión y traumatismo directo sobre el hombro.

Grados

Existen diferentes grados de esguinces según la gravedad de la lesión:

Grado I: Existe una pequeña distensión cápsulo- ligamentosa sin producir deformidad.

Grado II: Se produce subluxación de la articulación, apareciendo ligera deformidad y pequeña inestabilidad articular.

Grado III: Lesión capsulo-ligamentosa, principalmente del ligamento acromioclavicular, con desgarro de éste. Se produce un desplazamiento de la porción distal de clavícula, objetivándose deformidad.

Grados IV, V y VI: Según sea el desplazamiento  posterior, superior o inferior. Siendo estos desplazamientos de carácter severo, por rotura completa del complejo capsulo- ligamentoso, sobre todo en el grado VI.

Síntomas

Este tipo de lesión suele cursar con diversos síntomas:

  • Dolor en la zona articular del hombro.
  • Dependiendo del grado de lesión, a parte del dolor, aparecerá limitación funcional con dificultad para la movilidad del hombro por encima de 90º.
  • En esguinces grado III, IV, V y VI, se observa a simple vista deformidad de la clavícula.

Diagnóstico

El diagnóstico debe realizarse teniendo en cuenta la exploración clínica y estudio radiológico.

Tratamiento

En los esguinces grado I y II el tratamiento  será siempre conservador, mediante reposo, hielo local y toma de medicación (siempre que no exista alguna contraindicación). También puede requerir de inmovilización en cabestrillo para aliviar el dolor. Este tratamiento se completará con tratamiento de rehabilitación, hasta la recuperación funcional completa.

En esguinces grado III, el tratamiento puede ser conservador o quirúrgico. Consideramos que la recuperación funcional es similar en ambos casos, con la única diferencia de persistir solamente una pequeña deformidad articular de carácter estético. Por ello somos partidarios de realizar tratamiento conservador, similar al descrito en  esguinces grado I y II.

En esguinces grado IV, V y VI, dado que se produce la rotura completa capsulo-ligamentosa, normalmente, el tratamiento será quirúrgico.

Dr. Nicolás Miqueléiz
Centro Médico Deyre